Última actualización de la noticia: 01/10/2008
Fotografía por: mrmac04
Cuando llega la noche, la hora de acostarse y de dormir, muchos familiares de pacientes de Alzheimer tiemblan. ¿Cómo pasaremos esta noche? ¿Dormiremos o no? Estas son algunas de las preguntas que se formulan habitualmente muchos familiares de enfermos con este tipo de demencia
El cerebro reacciona estimulando la hormona que hace inducir al sueño en función de la oscuridad, por eso se tiende a pensar en acostarse cuando no hay luz en el ambiente. En un país mediterráneo, hay que adaptarse a las estaciones. Hay tener un término medio, por eso entre las 22 y 23 horas es una buena hora para acostar al paciente con Alzheimer.
En esta enfermedad el ciclo circadiano se mantiene, pero los pacientes dejan de hacer lo que hacían durante el día. Pierden el interés por las cosas, se muestran apáticos y se duermen durante el día. Se acumulan horas de sueño y el cerebro, que no necesita más de 6-7 horas a partir de los 60-70 años, ya no tiene necesidad de descansar. El ritmo de sueño puede ser normal si durante el día la persona permanece despierta.
Hay que tener en cuenta que la luz es importante, por lo tanto en personas que están en una fase avanzada de enfermedad y no tienen interés en otras cosas, este factor va a ser muy necesario. A estas personas hay que ponerlas cerca de la luz solar o, si está oscuro, colocarlos cerca de una luz bien potente.
En fases menos avanzadas hay que estimular a la persona para que durante el día tenga capacidad para entusiasmarse por cosas.
Cuando las personas que tienen demencia empiezan a moverse y hablar durante la noche, es que suelen tener problemas motores. En este caso suelen ser pacientes que tienen una fase del sueño alterada y aparecen trastornos del sueño en fase REM. Se debe medicar para que deje de moverse o hablar, porque sino el cuidador será quien este cansado por la mañana.
Este tipo de pacientes puede tener alucinaciones, no solo durante la noche sino también durante el día. Cuando oscurece, si está en un espacio donde no hay mucha luz, la persona va a interpretar las sombras. A veces, al pasar por delante de un espejo no se reconoce y puede pensar que hay otra persona. También puede hablar con las personas que estén en la televisión. Una forma de aliviarlo es que el entorno esté bien iluminado.
Las personas mayores con demencia no deben ser tratadas como niños. El cuidador debe tener recursos para poder ayudar a estas personas, tener habilidad para manejarse. Hay que ser totalmente flexible delante de la situación y nunca intentar imponerse o obligar a la persona a hacer algo.
Se ha conseguido saber qué sustancias faltan en el cerebro y se intenta, con la medicación, aportar desde fuera o conseguir que el cerebro produzca más. En este tipo de enfermedad, falta una sustancia, la acetilcolina que permite que las neuronas se comuniquen entre ellas. Las medicinas actúan aumentando la actividad neuronal. Es un tratamiento sintomático y mejora la calidad de vida del paciente.
1 Ficheros de sonido (14:33 mins):
No hay comentarios:
Publicar un comentario