Tratamiento farmacológico

Tratamiento farmacológico
Antioxidantes
Las vitaminas C y E previenen el daño oxidativo inducido por la proteína ß-amiloide en cultivos celulares y retardan el déficit de memoria en animales. Las vitaminas antioxidantes también equilibran el estado de oxidorreducción, contrarrestan el efecto nocivo de los radicales libres y protegen el cerebro del daño que estos producen. Distintos estudios sugieren que el Ginkgo biloba puede ser beneficioso en los neurotransmisores.
Antiinflamatorios
Los resultados de varios estudios epidemiológicos indican que el uso de antiinflamatorios no esteroideos (AINES) protegen contra la enfermedad de Alzheimer y pueden disminuir el deterioro cognitivo en estos pacientes. Este aparente efecto terapéutico puede ser explicado por la supresión de la inflamación que produce la placa neurofibrilar en el cerebro del paciente con esta enfermedad.
Vacunas
La utilización de la vacuna contra la enfermedad (inmunización con Aß-42 humana sintetasa) se ha utilizado en ratones, pero actualmente el ensayo clínico en humanos ha sido suspendido debido a la aparición de efectos adversos graves.
Tratamiento no farmacológico