Capítulo Aragua

miércoles, 9 de marzo de 2011

Olvido donde pongo las cosas. ¿Será un Alzheimer?

Cada día, mas personas se plantean esta pregunta cuando se dan cuentan de sus olvidos: “¿Dónde he puesto las llaves del coche?” “¿ He olvidado de mandar esta carta!” “No me acuerdo de mi no de DNI!”…

Según la Sociedad Española de Neurología, el 30% de las personas que acuden a la consulta del neurólogo tiene “miedo” de una enfermedad de Alzheimer cuando, hace 10 años, el porcentaje era solamente de 1%.

¿Porque un cambio tan importante en la estructura de las consultas de este especialista?



La razón radica en la creciente toma de conciencia del publico a cerca de esta patología. La palabra “Alzheimer”, hoy en día, es parte del lenguaje popular. Se debe al esfuerzo que, desde 15 años, las asociaciones de familias y los medios de comunicación hicieron para dar a conocer lo que es la enfermedad, sus síntomas y su evolución.



Todo el mundo sabe que la enfermedad de Alzheimer se manifiesta por trastornos de la memoria. Incluso, hay chistes sobre los olvidos y el Alzheimer. La mayoría de la gente sabe también que esta enfermedad modifica la personalidad de la persona que la sufre y que crea una dependencia que impide el desarrollo correcto de las actividades de la vida diaria. Es una patología cuya imagen, en el público, es muy negativa.

De allí, las dudas que expresen las personas de cierta edad cuando se dan cuenta de sus perdidas de memoria.



¿Son todas las quejas mnésicas (es decir de la memoria) el signo de empiezo de una Enfermedad de Alzheimer?

Por suerte, no es así. La mayor parte, en personas de más de 65 años, son quejas banales que no traducen la existencia de lesiones cerebrales sino una adaptación difícil al la vejez.



¿Como reconocer que une queja sea sintomática de una enfermedad de Alzheimer?



Hay tres características importantes a nivel clínico:



  1. Los trastornos de la memoria afectan a los hechos recientes: es decir lo que paso hace algunos días.
La persona no se acuerda de quien vino ayer a verla a casa, incluso

cuando es un familiar bien conocido. No se acuerda que hace 2 días ha pagado la factura de la electricidad. Ha olvidado de cerrar el grifo de la bañera.

En ningún caso esta afectada la memoria de los hechos del pasado. A menudo, es una sorpresa para la familia y el entorno darse cuenta que su familiar es incapaz de acordarse de lo que paso ayer cuando cuenta, con todo detalle, lo que le ocurrió hace 30 años.



  1. Los trastornos de la memoria no son aislados. Debe existir otra
modificación de las funciones cognitivas, por ejemplo falta de atención o de concentración, dificultades para el calculo mental, dificultades para manejar conceptos abstractos, dificultades para orientarse correctamente…



  1. Los trastornos de la memoria y la modificación de otra función cognitiva deben existir desde más de 6 meses.




TEMA 26. Olvido donde pongo las cosas. ¿Será un Alzheimer?
Cada día, mas personas se plantean esta pregunta cuando se dan cuentan de sus olvidos: “¿Dónde he puesto las llaves del coche?” “¿ He olvidado de mandar esta carta!” “No me acuerdo de mi no de DNI!”…

Según la Sociedad Española de Neurología, el 30% de las personas que acuden a la consulta del neurólogo tiene “miedo” de una enfermedad de Alzheimer cuando, hace 10 años, el porcentaje era solamente de 1%.

¿Porque un cambio tan importante en la estructura de las consultas de este especialista?



La razón radica en la creciente toma de conciencia del publico a cerca de esta patología. La palabra “Alzheimer”, hoy en día, es parte del lenguaje popular. Se debe al esfuerzo que, desde 15 años, las asociaciones de familias y los medios de comunicación hicieron para dar a conocer lo que es la enfermedad, sus síntomas y su evolución.



Todo el mundo sabe que la enfermedad de Alzheimer se manifiesta por trastornos de la memoria. Incluso, hay chistes sobre los olvidos y el Alzheimer. La mayoría de la gente sabe también que esta enfermedad modifica la personalidad de la persona que la sufre y que crea una dependencia que impide el desarrollo correcto de las actividades de la vida diaria. Es una patología cuya imagen, en el público, es muy negativa.

De allí, las dudas que expresen las personas de cierta edad cuando se dan cuenta de sus perdidas de memoria.



¿Son todas las quejas mnésicas (es decir de la memoria) el signo de empiezo de una Enfermedad de Alzheimer?

Por suerte, no es así. La mayor parte, en personas de más de 65 años, son quejas banales que no traducen la existencia de lesiones cerebrales sino una adaptación difícil al la vejez.



¿Como reconocer que une queja sea sintomática de una enfermedad de Alzheimer?



Hay tres características importantes a nivel clínico:



  1. Los trastornos de la memoria afectan a los hechos recientes: es decir lo que paso hace algunos días.
La persona no se acuerda de quien vino ayer a verla a casa, incluso

cuando es un familiar bien conocido. No se acuerda que hace 2 días ha pagado la factura de la electricidad. Ha olvidado de cerrar el grifo de la bañera.

En ningún caso esta afectada la memoria de los hechos del pasado. A menudo, es una sorpresa para la familia y el entorno darse cuenta que su familiar es incapaz de acordarse de lo que paso ayer cuando cuenta, con todo detalle, lo que le ocurrió hace 30 años.



  1. Los trastornos de la memoria no son aislados. Debe existir otra
modificación de las funciones cognitivas, por ejemplo falta de atención o de concentración, dificultades para el calculo mental, dificultades para manejar conceptos abstractos, dificultades para orientarse correctamente…



  1. Los trastornos de la memoria y la modificación de otra función cognitiva deben existir desde más de 6 meses
  2. DE FUNDACIÓN ALZHEIMER DE ESPAÑA

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