Incontinencias

Incontinencias

La incontinencia es común entre los pacientes de Alzheimer, especialmente en aquellas personas que se encuentran en las últimas etapas de la enfermedad. La incontinencia es un problema difícil cuando ud. está cuidando a un paciente de Alzheimer, e incluye la pérdida de control de la vejiga o los intestinos.
Puede controlar la incontinencia al cambiar la rutina del paciente, la ropa o el entorno. En un determinado momento, necesitará aceptar la incontinencia como una condición permanente de la enfermedad.
Si la incontinencia es un nuevo comportamiento, considere lo siguiente para identificar las causas posibles.

Condiciones médicas

Podría ser una causa médica. Por ejemplo, una infección urinaria, estreñimiento o la enfermedad de Parkinson.
La dificultad de movimiento podría hacer más difícil la situación para que el paciente llegue a tiempo al baño.
Si estos factores afectan al paciente, deberá consultar a su médico.

Tensión

La tensión o el movimiento podrían ser causa de incontinencia. Por ejemplo, la persona podría orinarse al estornudar, toser o reír.
El miedo por un incidente vergonzoso podría hacer que la persona quiera usar el baño continuamente.
Recuerde que los músculos débiles de la pelvis en una mujer podrían ocasionar pérdida incontrolable de la orina.

Medicamentos

Probablemente la persona está bajo un medicamento que podría intensificar la incontinencia.
Es posible que los tranquilizantes, sedantes o diuréticos contribuyan a la incontinencia. Recuerde que algunos tranquilizantes pueden relajar los músculos de la vejiga.
Los medicamentos que se usan para tratar la incontinencia pueden causar efectos secundarios como boca seca y problemas de los ojos.

Deshidratación

Es importante que el paciente de Alzheimer continúe bebiendo líquidos para no deshidratarse. La deshidratación puede en un momento crear una infección urinaria y originar incontinencia.

Diuréticos

Tenga cuidado de no dar a la persona líquidos que pudieran tener un efecto diurético. Bebidas como café, refrescos y té podrían contribuir a la incontinencia.

Medio ambiente

Observe y mejore las condiciones del entorno, tomando en cuenta lo siguiente:

• Puede que haya problemas en el medio que lo rodea.
• Es posible que la persona no pueda encontrar el baño.
• Quizás la persona tenga que ir muy lejos para llegar al baño a tiempo.
• Tal vez la persona tenga miedo a caerse.
• Hay obstáculos en el paso, como sillas u otros objetos.
• El camino debe estar bien iluminado.

Prendas de vestir

Es posible que la persona tenga problemas para desvestirse en el baño, o que botones y cierres le causen problemas.

Pasos a seguir

Innovación

Trate de adoptar nuevos conceptos e ideas. Recuerde que cada persona es diferente. Lo que funciona para una persona tal vez no funcione para otra.

Incidentes

Recuerde que los incidentes son vergonzosos. Sea parte del hecho entendiendo y evitando culpar o regañar al individuo.
Cuando la persona tenga éxito, felicítelo, motívelo y dele confianza.

Comunicación

Motive a la persona para que le diga cuando piensa o tiene la necesidad de ir al baño. Es posible que la persona sea incapaz de decir “Necesito ir al baño”.
Observe las pequeñas indicaciones cuando la persona necesita usar el baño. Podría mostrarse impaciente o hacer ruidos, sonidos no comunes o caminar alrededor del cuarto.

Haga planes por anticipado

Esté ud. mismo preparado para responder a la rutina y horario del paciente. Identifique cuando ocurran los incidentes y planifique con tiempo.
Si un incidente ocurre cada dos horas, necesitará llevar a la persona al baño a tiempo.
Podría encontrar útil llevar una libreta de notas para anotar cada vez que la persona va al baño para tener más control y evitar incidentes.

Cambios y ajustes

Sea paciente y dé tiempo suficiente a la persona cuando use el baño.
Además arregle el entorno para que le resulte fácil al paciente usar el baño. Por ejemplo, dejando iluminada el área de la sala o del baño.
Ponga un dibujo indicando el baño o pinte la puerta del baño de un color diferente al de la pared.
Si los incidentes ocurren por la noche, considere el uso de un chato o una bacinilla cerca de la cama.

Simplifique las prendas de vestir

Mantenga la ropa de la persona simple y práctica. En lugar de escoger ropa con cierres y botones, selecciones estilos de ropa que sean fáciles de quitar, poner y lavar, como los pantalones y sudaderas con elásticos en la cintura.
Considere el uso de productos protectores sobre la cama, pañales para adultos o forros en la ropa interior para las pacientes femeninas.
Asegúrese de que la persona use el baño. Es posible que necesite ayudarle para quitarle la ropa, limpiarlo y lavarlo.
Podría ayudar a estimular a la persona para que orine dándole un vaso de agua o haciendo correr el agua en el lavabo.
Mantenga limpias las partes sensibles de la piel con lavados regulares y aplicando talcos o cremas.

Control

Para ayudar a controlar la incontinencia durante la noche, limite a la persona para que no tome líquidos después de la cena. Por las noches disminuya las bebidas como refrescos, café o té.
Motive a la persona para que tome líquidos diariamente. Para variar podría introducir té de hierbas, café sin cafeína, gelatina o zumo de frutas.
Ayude a la persona con la enfermedad de Alzheimer a conservar su dignidad y su respeto, a pesar de los problemas de la incontinencia. Restableciendo la confianza y sin críticas, ayudará a disminuir los sentimientos de vergüenza.